La participación y el acceso a la información sobre el Transporte Urbano de Pasajeros están en discusión en el Concejo Municipal. Una propuesta de la concejal Roxana Ferreyra (Frente de Todos) sugiere incorporar a los usuarios a la Comisión de Seguimiento del Servicio que, a partir del último contrato con Mi Bus, solo integran representantes del Ejecutivo, el Concejo Municipal, la empresa y la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
Este martes (29/9) la Comisión de Servicios, Tránsito y Transporte volvió a analizar el proyecto en lo que refiere al acceso a la documentación pública pero las exposiciones se enfocaron en la intervención vecinal. “Quedan por fuera los usuarios y consideramos que quedan afuera los derechos del consumidor”, afirmó Ferreyra acerca de la representación que se busca dentro de la mesa de discusión.
La concejal recordó que en el 2012 la normativa contemplaba la asistencia de un representante por cada delegación municipal, y que en el actual proyecto del Frente de Todos se prevé sumar la asistencia de un referente por mesa barrial, otro por los estudiantes secundarios, un representante del Consejo Consultivo para Personas con Discapacidad y un integrante de una organización de defensa a los consumidores, además de la Defensora del Pueblo.
La voz del oficialismo estuvo en manos del concejal Carlos Sánchez (JSRN), quien afirmó que a su bloque de pertenencia le “hace ruido” la apertura a la participación porque se entiende que los vecinos se encuentran representados, en la actualidad, por los miembros del Concejo Municipal, “quienes podrían hacer llegar las demandas” de las mejoras del servicio al Ejecutivo.
Sánchez llevó al debate el convenio firmado con Mi Bus y advirtió que ya se estipulaba la conformación de la Comisión de Seguimiento, por lo que, según analizó, un nuevo cambio podría afectar aquella relación contractual.
La réplica llegó de parte de Julieta Wallace (FdT), quien defendió la oportunidad de establecer un mecanismo de participación comunitaria. “No es que nosotros en tanto concejales somos representantes de todos los barilochenses que deben quedarse en su casa porque estamos nosotros”, advirtió y se refirió a una “democracia dinámica” en la que los vecinos puedan plantear sus quejas respecto al servicio de colectivos y los concejales tomar esas denuncias para dar paso a las reformas.
Tras estas intervenciones, Ferreyra recordó que la propuesta también establece un dictamen semestral de la Comisión de Seguimiento del Servicio del Transporte Urbano en el que conste el estado de la prestación respecto a recorridos y frecuencias, entre otros datos acerca del sistema.
La concejal dijo que estas herramientas aportarán “transparencia” al manejo del Transporte Urbano de Pasajeros en la ciudad y destacó una reciente decisión del Ejecutivo. Es que desde la Intendencia se abrió una convocatoria a los vecinos que deseen asistir a las reuniones que se celebren en el edificio principal del Centro Cívico, aunque Ferreyra insistió en la posibilidad de que este accionar quede reglamentado por ordenanza para que no esté sujeto a la decisión unilateral del Ejecutivo Municipal.
La discusión continuará la próxima semana, en un proyecto (101/20) que establece una veintena de puntos a tratar para promover la participación ciudadana y las buenas prácticas en cuanto a transparencia en la gestión pública.
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