*Por Leonardo Carrizo
El tratamiento de los residuos que genera la ciudad es uno de los temas que se mantiene vigente en la agenda de cada gestión municipal. El proceso de remediación, la creación de nuevas celdas para la disposición final o la construcción de una nueva planta de clasificación no alcanzaron para reducir el impacto de las 150 toneladas que llegan al predio al final de cada jornada. La escasez de fondos públicos es otro de los puntos a tener en cuenta y es por eso que el Ejecutivo planteó una convocatoria pública para que empresas u organizaciones ofrezcan sus proyectos ambientales para Bariloche.
Las consecuencias del último incendio registrado dentro del vertedero, una densa nube de humo que se filtró por los barrios de los alrededores, volvió a poner los ojos sobre un sitio con impacto directo en el ambiente. La presencia continua de personas dentro del predio, la imposibilidad de cercar el perímetro, la poca capacidad de reciclado, la aparición de chatarra y las quejas de las juntas vecinales abrieron las puertas a quienes ven en la basura una oportunidad de negocio, tal como sucede en otros puntos del país.
Pero esta alternativa no es nueva para el municipio. A comienzos del 2019 tres empresas, con sede en Dinamarca, Alemania y China, se mostraron interesadas en reconvertir la basura. Dos de ellas propusieron generar energía térmica y eléctrica mientras que la restante pidió el lugar para fabricar materiales de construcción en forma de bloques, ladrillos, piezas de pavimento o cordones de vereda. Incluso la anterior administración del gobierno nacional había mostrado interés en instalar una planta de biogás que pudiera devolver energía al sistema eléctrico. Ninguna prosperó por falta de financiamiento.
Ahora el municipio puso en marcha un Registro de Proyectos Ambientales con la idea de convocar a emprendedores u organizaciones, del país o el extranjero, para que presenten alternativas para remediar y “poner en valor” al Centro de Residuos Urbanos Municipal con todo lo que contiene el predio. Los interesados tendrán tiempo hasta el 20 de noviembre para dejar sus programas ante la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Urbano, mientras que el 15 de diciembre se conocerá al proyecto ganador que servirá de base para una futura licitación del servicio.
“Está abierta a cualquier tipo de empresa, gente de acá también puede ser pero tiene que tener la capacidad económica”, comentó el secretario de Ambiente y Desarrollo Urbano, Pablo Bullaude, acerca de una propuesta que deberá contemplar la posibilidad de autofinanciarse o de obtener fondos de terceros por su cuenta. Precisamente el financiamiento inicial es el principal inconveniente que enfrenta el municipio y por eso se espera lograr una solución con la intervención de un nuevo socio.
Bullaude explicó que la convocatoria surgió de la necesidad del Estado de dar una solución “definitiva e integral” a la basura. No es menor que desde hace bastante tiempo diversas empresas presentaran propuestas parciales, un antecedente que terminó por dar impulso a esta idea de encomendar a otro actor este servicio público.
A través de la Resolución 2324 el Intendente Municipal estableció los requisitos que deberán cumplimentar los postulantes. Además de antecedentes en procesos similares, se pide especificar la modalidad de financiamiento, la cantidad de residuos a procesar con una base de 150 toneladas diarias, los plazos de construcción y entrada en operación, una proyección de puestos de trabajo a generar en forma directa e indirecta e incluso estimaciones de energía eléctrica a generar o de subproductos o servicios que se pudieran obtener.
Un requisito no menor es la cesión gratuita de los derechos de propiedad intelectual o del uso de patentes sobre el proyecto presentado a favor del municipio “por tiempo indeterminado”.
Los interesados tendrán que prever tanto el tratamiento de residuos domiciliarios como forestales e incluir a la Asociación de Recicladores Bariloche (ARB) en el proceso. Y es que esta organización social tiene un rol de importancia tal que también conformará la Comisión Evaluadora que analizará los proyectos junto a representantes de INVAP, la Cooperativa de Electricidad Bariloche (CEB), la Subsecretaría de Desarrollo Sustentable de Río Negro, el Concejo Municipal y el propio municipio. La participación vecinal quedará sujeta únicamente al conocimiento del procedimiento administrativo.
Bullaude explicó que el proyecto seleccionado servirá de base para la confección del pliego licitatorio, otorgando “puntos extra” a los autores en caso de presentarse, aunque no descartó que el Ejecutivo recurra al procedimiento que inicia una iniciativa privada tal como ocurrió con la prórroga de la concesión en el cerro Catedral. En todo caso la solución no será inmediata.
A pesar de las libertades que ofrece la comuna en la confección de las propuestas, se obliga a los privados a someterse a los parámetros de la ordenanza 2062/10 para que el tratamiento contemple la reducción de emisión de gases de efecto invernadero, procure la disposición adecuada para los residuos que no se puedan reconvertir y “colaboren con el Estado en la eficiencia de la utilización de los recursos públicos”, por medio de una sociedad que termine por reciclar una vieja intención que, hasta ahora, no encontró una salida definitiva.
*Foto archivo Alejandra Bartoliche
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