"Más allá de los ánimos caldeados fue un encuentro bastante positivo", evaluó el concejal Gerardo del Río sobre la reunión por el transporte, aunque lamentó el ámbito en el que se dio.
Sostuvo que "muchas veces no se escucha a las partes, que se cansan de pedir explicaciones", pero "hoy se abrió un marco de trabajo a futuro que creo que puede ser propicio para buscar una solución fructífera que le sirva a los usuarios y trabajadores".
Comentó que se dio esta reunión porque se solicitó un cuarto intermedio en la reunión anterior, porque se pedía un congelamiento de tarifas, pero había incertidumbre con lo que podría pasar con los trabajadores. "Solicitamos un cuarto intermedio para interiorizarnos del tema, porque tomar medidas en ese contexto conlleva mucha responsabilidad y en eso surgió que se iba a producir la reunión en Buenos Aires donde se acordó lo que se acordó que nos da un panorama mas claro y la posibilidad de trabajar de acá a 120 días en muchos aspectos". Enfatizó que es un problema que se debe resolver entre todos.
Destacó que se reintegra el subsidio provincial, se hace un aporte por trabajador y 20 pesos por litro de combustible por lo que "no tendrían argumentos para no prestar el servicio como corresponde".
Respecto al anuncio de las combis para realizar recorridos concretos frente a la imposibilidad de hacer frente a la demanda por parte de Mi Bus, dijo que la empresa del servicio Urbano de Pasajeros dijo que "creo que la mayoría nos enteramos por los medios, tomar una decisión así sin analizarlo, ver si es positivo o no, sumar las voces de los distintos actores, me parecería desacertado y más si nos enteramos por los medios, oficialmente no nos han dicho nada".
Enfatizó que el servicio tiene que empezar a mejorar y que los usuarios tienen el derecho de viajar como corresponde y que se respeten las frecuencias, al margen de reconocer que "venimos de una situación muy compleja, donde se habían sacado los subsidios". Destacó que hay que aprovechar la posibilidad que se está dando actualmente.
Consideró que a la empresa no le debe resultar simpático.
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