La emergencia sanitaria obligó a cambiar la forma de atención de algunas especialidades médicas y ahora un proyecto de Declaración impulsa que tanto obras sociales como prepagas amplíen sus coberturas. La iniciativa de la rionegrina Lorena Matzen cuenta con la adhesión de los diputados del radicalismo y pide al Ejecutivo Nacional que la medida se extienda hasta el fin de la emergencia sanitaria.
El texto prevé que los hospitales privados también reconozcan y garanticen la cobertura del sistema de salud en forma “no presencial” que, durante la pandemia de la COVID-19, obliga a utilizar vías alternativas de comunicación como llamados telefónicos, video llamadas, videoconferencias, mensajes de texto y de voz, correos electrónicos o intercambios a través de Whatsapp.
La Diputada explicó que algunos profesionales vieron limitadas sus prestaciones por las medidas de aislamiento obligatorio, haciendo que se descontinúen las terapias de adultos mayores y personas con discapacidad, entre otros, bajo el sistema de atención de prestadores independientes.
“Es inaceptable que las obras sociales y prepagas no afronten el sostenimiento de dichos servicios en este momento en que el servicio sanitario es una necesidad de primer orden para la población”, afirmó Matzen.
La rionegrina también se refirió al “esfuerzo conjunto” del Estado con el sector privado y alentó a garantizar los servicios esenciales a los sectores más vulnerables. En este sentido agregó que, por los servicios reconocidos, obras sociales y prepagas “continúan recibiendo los aportes correspondientes a su prestación, en este caso más allá de la emergencia sanitaria”.
Comentar